Vecinos que han participado en iniciativa de Teck Quebrada Blanca podrán trabajar en este punto verde de forma colaborativa.
Este fin de semana miembros de la Fundación Eco Rayen, quienes desarrollan el proyecto La Huerta en Mi Casa, llegaron hasta Caleta Caramucho donde se realizó la instalación de una huerta en espacio público, instancia en que los vecinos tendrán la posibilidad de cosechar vegetales y hierbas de distinto tipo.
La directora ejecutiva de la Fundación Eco Rayen, Pamela Pérez, participó junto a vecinos y niñas del sector de la instalación de esta área y comentó que “este es uno de los últimos talleres que tenemos en este programa, que es el taller de huertas comunitarias, donde queremos que los vecinos empiecen a tener más interacción entre ellos y que puedan cuidar una huerta en común. Tenemos dos huertas, una que es medicinal y la otra que es comestible”.
La directora agregó que el último taller fue el único que se realiza en forma separada, uno por caleta, ya que en las versiones anteriores pudieron interactuar todos los participantes, más de 50 personas de las caletas de Chanavayita, Caramucho y Cáñamo.
Este proyecto se enmarca en el programa social de la mesa de trabajo entre las organizaciones sociales del borde costero y Teck, en que las familias plantearon – en el contexto de pandemia y confinamiento- la necesidad de aprender una actividad ambiental y que además les permitirá contar con sus propias verduras de manera sustentable que contribuya a mejorar su calidad de vida.
Ruth González, participante de estos talleres y vecina de Caramucho, comentó que “es importante el huerto comunitario porque también nos da la posibilidad de enseñarle a nuestros niños a plantar, aprender de dónde salen las plantas, las cosas que se comen, enseñarles cómo se cuida una planta y se trabaja en familia, eso une también a la comunidad, cuando hay un huerto familiar, porque se trabaja con alegría, porque todo lo que es la naturaleza te da alegría” sostuvo.